11-09-2024
Anabel Alonso es la protagonista de la revisión de uno de nuestros clásicos literarios, La Celestina, que hace el escritor y dramaturgo Eduardo Galán y que después de haber recorrido buena parte de los teatros de la Península, se instala en noviembre en el Teatro Leal, el día 6 con dos funciones seguidas. Dice Anabel Alonso (Santurce, 1964), quien encarnará a la más popular alcahueta de la literatura española, que “esta Celestina cuenta su historia y da su versión de los hechos en el trágico amor que marcó a Calisto y Melibea; digamos que se da realmente a conocer sobre el escenario mostrando un poco más de sí misma, enseñando a los espectadores un lado desconocido hasta ahora que humaniza al personaje que creó Fernando de Rojas”.
Makaron Gestión y Proyectos Culturales trae este clásico del género trágico a Tenerife y Gran Canaria y los tickets ya están a la venta a través de ésta misma web. El Instituto Canario de Desarrollo Cultural confiere el apoyo a estas citas en las Islas.
El célebre cuento de Fernando de Rojas es un clásico de la literatura universal que ejerció una gran influencia en la literatura posterior, pues se escribió en un momento clave de cambios importantes, sobre todo sociales e ideológicos, entre la Edad Media y el Renacimiento en España. La obra es, en cuanto a contexto, un fiel reflejo de esos cambios sociales y culturales que estaban teniendo lugar en la época, como el cuestionamiento de los valores tradicionales y la emergencia de una nueva visión del mundo, del amor, del sexo, de la libertad, etc.
Desde el punto de vista literario, La Celestina clásica logró alejarse de los géneros medievales y se acercó a un estilo más realista y psicológico, anticipando algunas de las características de la literatura renacentista, pues no hay sino que ver que La Celestina fue un personaje clave en la historia de amor entre Calisto y Melibea ejerciendo sus artes y su experiencia en la manipulación del resto de los personajes para que se diera una historia de amor a conveniencia, un personaje que entrañó cierto halo peyorativo.
Sin embargo en esta nueva lectura de Eduardo Galán, que lleva a la escena Antonio C. Guijosa, la Celestina cuenta su versión de los hechos, lo que le aporta al personaje una cierta candidez y necesidad de justificar a Pleberio (padre de Melibea), y a la audiencia, por qué las cosas sucedieron así, en un intento de desmarcarse de esa manipulación que llenaba y condenaba al personaje que creó Fernando de Rojas.
La propuesta teatral incluye, aparte de Anabel Alonso, a buen puñado de actores como José Saiz, Víctor Sainz, Claudia Taboada, Beatriz Grimaldos y David Huertas.